Rumania y Bulgaria celebran su ingreso a la UE

Rumania y Bulgaria celebraron con alborozo a la medianoche local su ingreso en la Unión Europea (UE), que cuenta a partir de ahora con 27 estados miembros. Ambos países aportan al club comunitario una población de 30 millones de habitantes -pero sólo añadirán un uno por ciento a la producción económica- y convertirán a la Unión en un espacio de casi 500 millones de europeos.

Con la incorporación de las dos ex repúblicas socialistas, la UE pone punto final a su quinta ampliación, iniciada tras el fin de la guerra fría, culminada en mayo de 2004 con la entrada de diez nuevos miembros del centro y este de Europa y considerada el símbolo de la reunificación del Viejo continente.

La apuesta de ampliarse hacia el Este fue de tal envergadura que la UE tuvo que idear una reforma institucional para poder funcionar eficazmente con 27 miembros, reforma recogida en el Tratado constitucional ahora en barbecho por el rechazo de Francia y Países Bajos a ratificar el texto.

Otros aspirantes a adherirse al bloque como Turquía, Albania y los países balcánicos tendrán que esperar mucho para obtener la membresía, dados los temores en algunos países de Europa occidental de que la UE podría estar ampliándose demasiado.

Telecinco contrata a Laura Bozzo para presentar un programa en 2007

La cadena española de televisión Telecinco contrató a la presentadora peruana Laura Bozzo para presentar un programa semanal y en horario estelar.

La presentadora peruana de televisión Laura Bozzo fue condenada a cuatro años de prisión suspendida como cómplice de los delitos de asociación ilícita para delinquir y peculado, por haber recibido determinadas cantidades de dinero de Vladimiro Montesinos, ex "hombre fuerte" del gobierno del ex presidente Alberto Fujimori.

Este proceso no impidió que Bozzo, durante tres años y bajo arresto domiciliario, condujera su exitoso programa televisivo "Laura" para Latinoamérica y EEUU.

Women Lose Ground in the New Iraq

Browsing the shelves of a cosmetics store in the Karrada shopping district, Zahra Khalid felt giddy at the sight of Alberto shampoo and Miss Rose eye shadow, blusher and powder.

Before leaving her house, she had covered her body in a billowing black abaya and wrapped a black head scarf around her thick brown hair. She had asked her brother to drive. She had done all the things that a woman living in Baghdad is supposed to do these days to avoid drawing attention to herself.

Life has become more difficult for most Iraqis since the February bombing of a Shiite Muslim mosque in Samarra sparked a rise in sectarian killings and overall lawlessness. For many women, though, it has become unbearable.

As Islamic fundamentalism seeps into society and sectarian warfare escalates, more and more women live in fear of being kidnapped or raped. They receive death threats because of their religious sects and careers. They are harassed for not abiding by the strict dress code of long skirts and head scarves or for driving cars.

For much of the 20th century, and under various leaders, Iraq was one of the most progressive Middle Eastern countries in its treatment of women, who were encouraged to go to school and enter the workforce. Saddam Hussein's Baath Party espoused a secular Arab nationalism that advocated women's full participation in society. But years of war changed that.

In the days after the U.S.-led invasion in 2003, many women were hopeful that they would enjoy greater parity with men. President Bush said that increasing women's rights was essential to creating a new, democratic Iraq.

But interviews with 16 Iraqi women, ranging in age from 21 to 52, show that much of that postwar hope is gone. The younger women say they fear being snatched on their way to school and wonder whether their college degrees will mean anything in the new Iraq. The older women, proud of their education and careers, are watching their independence slip away.

Cambio Climático, un problema mundial

El efecto invernadero provocará el deshielo estival del Polo Norte en menos de 40 años por culpa del calentamiento global. Es la conclusión de un equipo de investigadores estadounidenses y canadienses. Si continúan las actuales emisiones de gas a la atmósfera el Ártico se derretirá durante el verano de 2040.

Tan sólo una zona costera del norte de Groenlandia y Canadá permanecería helada. En noviembre, la capa de hielo del Ártico tenía dos millones de kilómetros cuadrados menos de hielo de lo que debería tener.

El derretimiento masivo del Polo Norte podría, además, cambiar el ecosistema del mundo, el clima, las rutas marítimas e incluso las necesidades nacionales de defensa.